Sociedad
La palabra sociedad proviene del latín societas (unión), de hecho, en sentido amplio y genérico, se entiende un conjunto de individuos (hombres u animales) unidos por relaciones de diferentes tipos que se instauran dentro de la misma sociedad.
A nivel antropológico, el ordenamiento social depende de varios factores. El tipo de sociedad más sencilla se basa sobre el grupo domestico o familia, que ocupa una o más viviendas; y que a su vez crea la unión de unos grupos domésticos que constituyen una aldea y más adelante en la historia humana una ciudad.
Dentro de una sociedad, la relación entre individuos de un mismo grupo se ha determinado siempre por varios factores: matrimonio, consanguinidad, cohabitación, etc. Como, por ejemplo, los sistemas de descendencias que conllevan a la formación de grupos que se basan sobre la consciencia de tener un origen genealógico común. La cohesión social, además, depende también de factores religiosos y económicos.
Efectivamente, para ser considerada tal, la sociedad tiene unos factores comunes:
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Los miembros de la sociedad comparten el mismo territorio e interactúan entre ellos para satisfacer las necesidades;
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Los miembros de una misma sociedad comparten factores culturales como: ritos, costumbres, valores y normas, aunque no de forma homogénea;
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Dentro de la sociedad está presente una forma de organización económica, que está compuesta por normas e instituciones;
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El individuo que integra una sociedad es consciente de que es parte de esa y se identifica con ella.
A pesar de esto, no todas las sociedades comparten todas estas características; como pasa con los nómades como los inuit, los cuales no comparten el mismo territorio y viven en tierras muy amplias; o los fulanis que han sufridos muchas influencias externas.
Las sociedades se determinan, además, por sus estructuras sociales que organizan y determinan las relaciones entre los varios miembros, basándose sobre varios factores que son:
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Estatus y rol social: el estatus corresponde a la posición social de un individuo dentro de la estructura social. Los estatus son adscritos, o sea determinados desde el nacimiento y por factores independientes a la voluntad del individuo; adquiridos, los cuales dependen de las acciones y elecciones del individuo, como por ejemplo la profesión y la posición económica alcanzada. Cada estatus es el correspectivo de un determinado rol social, al cual corresponden expectativas respeto al comportamiento de un individuo, aquel que pertenece a un estatus social deberá de respetar unas normas específicas.
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Grupos: las relaciones entre individuos determinan la formación dentro del grupo en el cual los miembros interactúan y comparten objetivos y valores. Los grupos primarios son los que tienen contacto directo y relaciones estrechas, como en la familia; los secundarios mantienen relaciones impersonales y formales, como en un grupo de trabajo; por otro lado, los grupos formales están definidos por una estructura reconocida a nivel social, en el cual los criterios de acceso están regulados, la interacción tiene un fin especifico y una meta común; mientras que los grupos informales no están regulados por ninguna estructura definida por la organización, además se forma de manera natural por la necesidad de tener contacto social, como puede ser un grupo de amigos.
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Instituciones: son formas de organizaciones con las cuales la sociedad responde a las necesidades de sus miembros. Como podría ser, por ejemplo, el sistema escolar.
En definitiva, la sociedad es un conjunto de personas que tiene varias características anteriormente expuestas. Además, es importante mencionar que la cultura es un factor que influye de forma directa en la construcción de esta, puesto que los valores morales son fundamentales para el progreso de las sociedades humanas.
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